24 abril 2007

¿Y dónde está la dignidad?


Se pasó Eva.

No hablo de aquella mujer que -dicen- tentó al hombre y le dio a comer el fruto prohibido. Me niego a creer del todo esta teoría, apelando al libre albedrío que -dicen, insisto...- con que Dios dotó al Hombre. ¿No es un poco ilógico pensar que se dejó seducir por una serpiente que manipuló a una mujer?

Pero no quiero inmiscuirme en asuntos dogmáticos (por lo menos, no hoy). Estoy hablando de Eva Gómez, la conductora del programa "El diario de Eva" (copia del españolísimo "El diario de Patricia" y todos los productos afines). En realidad, no sólo me refiero a ella, sino que a todo su equipo, cuya cara visible -afortunada o desafortunadamente- es la blonda hija de la Madre Patria.

Hace un par de días había comenzado su nueva temporada, después del post natal. El regreso se anunciaba con bombos y platillos y muchas mamás esperaban con ansias ver los nuevos "casos" (testimonios) que el programa traía consigo. Y comenzó bien: una audiencia relativamente decente para el horario, un look fresco, un acento aún más chileno que antes y, sobre todo, historias más dramáticamente espeluznantes.

Eso: espeluznantes... Porque no se me ocurre nada mejor (¿peor?) para retratar el caso en que una madre y un padre revelaban a todo el país (en horario familiar) una falsa patenidad, mediante la realización de un test de ADN. Y eso no fue todo: después de ser increpada, la mujer-mentirosa se vio obligada a contar su más grande secreto: que su hijo era producto de una violación incestuosa. Llanto, angustia, tensión. Mentira, decepción. Un espectáculo miserable de la TV chilena.

¿Hasta qué punto somos capaces de llegar para generar "impacto" en los medios de comuniación? ¿Hasta qué punto transgredir la dignidad humana? Tal como versa el dicho popular: ¿todo por el ráting?

Lo que se dice como contraargumento no me satisfece: es cierto que el test de ADN es caro y que, en este caso, lo pagó Producción. Insuficiente. Es cierto, también, que se prestará ayuda sicológica al niño, a la madre y al padre, pero ¿por cuánto tiempo? ¿Hasta que se apaguen las cámaras y el "caso" sea reemplazado por otro más impactante? Lo siento, pero nada en este caso es suficiente para justificar el circo que se ha hecho de una situación tan delicada.

Y entre todo esto, la estoica Eva sigue diciendo que "estuvo muy bien lo que hicieron, porque ella es una persona que ayuda a la sociedad y que no trabaja por el ráting". ¿Cómo tan porfiada?, me pregunto. ¿No será mejor decir que se sobrepasaron? Porque si no lo hace(n), es probable que los hechos como éstos se sucedan... aunque haya habido un pronunciamiento de parte del canal de Sebastián Piñera (el ex casi presidente de Chile, por Dios), aunque el programa haya sido cambiado de horario, aunque Eva se engrife cuando la atacan en TVN...

A pesar de todo eso, no hay peor ciego que el que no quiere ver.

Rodrigo

1 comentario:

EzLoKhAi dijo...

Lo peor fue cunado lentamente sacaba el resultado de ADN del sobre con un "redoble de tambores" de fondo... muy muy triste...
Há, pero ella ya reconocio el error.
Y el Consejo de Television la esta encausando la sanción correspondiente.

Saludos Rod, estan re` buenos los post..

Zlkhai.